Lección 1
El Bautismo del Espíritu Santo,
El Bautismo del Espíritu Santo,
Una Experiencia Posterior a la Salvación
Texto Bíblico : Hechos 8:12-19
Verdad Central: Hay una experiencia que sigue a la salvación, el ser llenos del Espíritu Santo.
Siendo un ministro joven de cierta denominación me habían enseñado que cuando una persona es salva, tiene el Espíritu Santo; lo cual es verdad en cierto sentido. Sin embargo, mi denominación enseñaba que cuando uno es salvo, tiene todo el Espíritu Santo que se puede tener.
El pasaje de la escritura que está debajo me ayudó a ver que hay una experiencia posterior a la salvación llamada recibir el Espíritu Santo, o el bautismo del Espíritu Santo.
Estos versículos muestran que aunque los samaritanos eran salvos, los apóstoles no creían que tuviesen todo el Espíritu Santo que se podía tener.
El Ministerio de Felipe en Samaria
HECHOS 8: 12, 13
12 Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres.
13 También creyó Simón mismo, y habiéndose bautizado, estaba siempre con Felipe; y viendo las señales y grandes milagros que se hacían, estaba atónito.
El ministerio de Felipe en Samaria fue bendecido abundantemente por Dios. Constantemente eran hechos milagros poderosos. Muchos fueron salvos y sanos, de acuerdo con Hechos 8: 7,8 "Porque de muchos que tenían espíritus inmundos, salían éstos dando grandes voces; y muchos paralíticos y cojos eran sanados; así que había gran gozo en aquella ciudad".
Los samaritamos creyeron los sermones de Felipe sobre el reino de Dios y el Nombre de Jesús, y fueron bautizados en agua: "Pero cuando CREYERON a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se BAUTIZABAN hombres y mujeres" (v. 12).
Jesús había dicho, ". . . Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que CREYERE y fuere BAUTIZADO será salvo. . . ." (Marcos 16: 15,16). Estos samaritanos hicieron las dos cosas, creyeron y fueron bautizados. ¿Fueron salvos? ¡De acuerdo con Jesús lo fueron! Sin embargo ninguno de ellos había recibido el bautismo del Espíritu Santo.
Texto Bíblico : Hechos 8:12-19
Verdad Central: Hay una experiencia que sigue a la salvación, el ser llenos del Espíritu Santo.
Siendo un ministro joven de cierta denominación me habían enseñado que cuando una persona es salva, tiene el Espíritu Santo; lo cual es verdad en cierto sentido. Sin embargo, mi denominación enseñaba que cuando uno es salvo, tiene todo el Espíritu Santo que se puede tener.
El pasaje de la escritura que está debajo me ayudó a ver que hay una experiencia posterior a la salvación llamada recibir el Espíritu Santo, o el bautismo del Espíritu Santo.
Estos versículos muestran que aunque los samaritanos eran salvos, los apóstoles no creían que tuviesen todo el Espíritu Santo que se podía tener.
El Ministerio de Felipe en Samaria
HECHOS 8: 12, 13
12 Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres.
13 También creyó Simón mismo, y habiéndose bautizado, estaba siempre con Felipe; y viendo las señales y grandes milagros que se hacían, estaba atónito.
El ministerio de Felipe en Samaria fue bendecido abundantemente por Dios. Constantemente eran hechos milagros poderosos. Muchos fueron salvos y sanos, de acuerdo con Hechos 8: 7,8 "Porque de muchos que tenían espíritus inmundos, salían éstos dando grandes voces; y muchos paralíticos y cojos eran sanados; así que había gran gozo en aquella ciudad".
Los samaritamos creyeron los sermones de Felipe sobre el reino de Dios y el Nombre de Jesús, y fueron bautizados en agua: "Pero cuando CREYERON a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se BAUTIZABAN hombres y mujeres" (v. 12).
Jesús había dicho, ". . . Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que CREYERE y fuere BAUTIZADO será salvo. . . ." (Marcos 16: 15,16). Estos samaritanos hicieron las dos cosas, creyeron y fueron bautizados. ¿Fueron salvos? ¡De acuerdo con Jesús lo fueron! Sin embargo ninguno de ellos había recibido el bautismo del Espíritu Santo.
Hay una obra del Espíritu Santo que está incluida en el Nuevo Nacimiento pero esa obra no es llamada recibir el Espíritu Santo (o el bautismo del Espíritu Santo). Es llamada ser nacido de nuevo (o recibir vida eterna). La experiencia que sigue a la salvación es llamada recibir el Espíritu Santo, bautismo del Espíritu Santo, o ser llenos del Espíritu Santo.
Somos nacidos de nuevo por la Palabra de Dios. Pedro dice que somos nacidos "no de simiente corruptible, sino de incorruptible, POR LA PALABRA DE DIOS que vive y permanece para siempre" (1 Pedro 1:23)
Pedro y Juan enviados a Samaria
HECHOS 8: 14-17
14 Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria había recibido la
Palabra de Dios, enviaron allá a Pedro y a Juan;
15 los cuales, habiendo venido, oraron por ellos para que recibiesen el Espíritu Santo; 16 porque aún no había descendido sobre ninguno de ellos, sino que solamente habían sido bautizados en el nombre de Jesús.
17 Entonces les imponían las manos, y recibían el Espíritu Santo.
Nuestro texto dice en el versículo catorce, "Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria HABIA RECIBIDO LA PALABRA DE DIOS. . ." Esta es una prueba concluyente que esta gente fue salva genuinamente. Los apóstoles reconocieron que eran salvos, porque después de oír las cosas maravillosas que Dios había hecho a través del ministerio de Felipe, enviaron a Pedro y a Juan a imponer las manos sobre los nuevos convertidos para que recibieran el Espíritu Santo.
No hay ningún registro de que alguno de aquellos a quienes Pedro y Juan impusieron las manos hubiera dejado de recibir. La Biblia simplemente declara, "Entonces les imponían las manos, y recibían el Espíritu Santo" (Hechos 8:17).
Pedro y Juan fueron enviados a Samaria con un propósito específico. ¿Cuál era ese propósito? La respuesta se encuentra en el versículo quince: "los cuales, habiendo venido, oraron por ellos para que recibiesen el Espíritu Santo."
Los otros apóstoles en Jerusalén los enviaron a Samaria con este propósito específico. ¿Por qué tuvieron que orar para que aquellos samaritanos recibieran el Espíritu Santo? ¿Por qué no pudo Felipe haber orado por ellos igualmente?
Debemos recordar que todos tenemos nuestro lugar en el plan de Dios. Debemos encontrar ese lugar y hacer lo que Dios quiere que hagamos. Dios tiene ministerios especiales; El no nos llamó a todos a ministrar de la misma forma, y El no nos dio a todos el mismo ministerio.
Felipe era un evangelista. Su ministerio era dirigir a muchos a la experiencia de la salvación en Cristo Jesús. Pedro y Juan, por otra parte, tenían el ministerio específico de poner las manos sobre la gente para recibir el Espíritu Santo.
Simón el Mago
HECHOS 8: 18, 19
18 Cuando vio Simón que por la imposición de las manos de los apóstoles se daba el Espíritu Santo, les ofreció dinero.
19 diciendo: Dadme también a mí este poder, para que cualquiera a quien yo impusiere las manos reciba el Espíritu Santo.
Simón el mago ofreció dinero a Pedro y a Juan, diciendo, ". . . Dadme también a mí este poder, para que cualquiera a quien yo impusiere las manos reciba el Espíritu Santo" (v.19)
Algunos han pensado que Simón trató de comprar el Espíritu Santo. No es así. El trató de comprar la habilidad de imponer las manos sobre las personas y hacerles recibir el Espíritu Santo.
Pedro le contestó,". . . Tu dinero perezca contigo, porque has pensado que el don de Dios se obtiene con dinero" (v. 20).
Hay cuatro palabras griegas diferentes traducidas "don" en el Nuevo Testamento. Esta palabra griega en particular significa "una dote". Pedro dijo que él y Juan estaban dotados, o investidos, por el Espíritu Santo para imponer las manos sobre las personas para recibir el bautismo del Espíritu Santo.
¿Cómo sabemos que estos samaritanos realmente hablaron en lenguas? Algunos que no creen en las lenguas argumentan que esta escritura no dice nada acerca de hablar en lenguas.
No hay evidencia, sin embargo, de que no hablaran en lenguas. De hecho, los estudiantes de Historia de la Iglesia saben que los Padres de la Iglesia Primitiva están de acuerdo en que si hablaron en lenguas en Samaria. Y leemos en otro lugar del Nuevo Testamento que aquellos que fueron llenos del Espíritu Santo hablaron en lenguas.
También es evidente que estos samaritanos habían hablado en lenguas, porque "Cuando VIO Simón que por la imposición de las manos de los apóstoles se daba el Espíritu Santo. . . ." (v. 18).
De cierto, el Espíritu Santo no puede ser visto con el ojo físico, porque El es un Espíritu. Sin embargo tenía que haber habido alguna clase de señal física por la cuál Simón supiera que habían recibido el Espíritu Santo. Tenía que haber habido algo que se registrara en los sentidos físicos de Simón para poder decir que ellos habían recibido el Espíritu Santo. Simón no recibió el Espíritu Santo, pero pudo ver que otros sí lo habían recibido. ¿Cómo?
"Quizás fue porque Simón vio que los samaritanos estaban llenos de gozo" me dijo cierto ministro. Esta sin embargo no podría ser la explicación, porque Simón ya había visto su gozo. El versículo ocho informa, ". . . había gran gozo en aquella ciudad." Ellos ya tenían gozo antes de que Pedro y Juan llegaran a Jerusalén, y antes de recibir el bautismo del Espíritu Santo.
¿Qué clase de señal, entonces, haría que Simón supiera que esta gente había recibido el Espíritu Santo cuando Pedro y Juan impusieron las manos sobre ellos? Toda evidencia indica que la señal que fue manifestada fue el hablar en lenguas. Esa era la señal que convenció a Simón de que habían recibido el Espíritu Santo.
El hablar en lenguas no es el Espíritu Santo, y el Espíritu Santo no es el hablar en lenguas - pero van de mano en mano. Es como la lengua del zapato. La lengua no es el zapato, y el zapato no es la lengua, pero cada uno es una parte importante del otro.
Cuando alguien compra un automóvil en Tejas, se le entrega un certificado como evidencia de que él es el dueño. El automóvil no es el certificado, ni el certificado es el automóvil, pero no podrá ir muy lejos con aquel automóvil si no tiene el certificado (o la evidencia).
Si tiene la plenitud del Espíritu Santo, debería tener la evidencia (las lenguas) a su lado.
Dese cuenta de que no hay la menor sugerencia en Hechos 8 de que Pedro y Juan les enseñaron a los samaritamos a esperar por el Espíritu Santo.
El enseñar a la gente a esperar por la plenitud del Espíritu Santo, el cual ya ha sido dado como un don gratuito, sólo produce duda e indecisión.
Howard Carter, quien era el supervisor general de las Asambleas de Dios en Gran Bretaña durante muchos años, fundó la más antigua escuela Bíblica Pentecostal del mundo, y fue uno de los primeros maestros en los círculos del Evangelio Completo alrededor del mundo.
El dijo que el enseñar a la gente a esperar por el Espíritu Santo no es nada más que una combinación de obras e incredulidad.
Don Gratuito
Note algo más en Hechos 8 Pedro y Juan no oraron para que Dios les diese a los samaritanos el Espíritu Santo. Oraron para que los samaritanos recibiesen el Espíritu Santo.
A menudo oramos, "Señor salva a las almas en el culto de esta noche. Sana a los enfermos." Sin embargo, no encontramos donde ellos oraron de este modo en los Hechos de los Apóstoles (y nosotros deberíamos orar de acuerdo con la Palabra).
Yo oro por la gente, pero no para que Dios los salve, porque El ya ha hecho algo para salvarles: Envió a su Hijo para morir por nosotros. Dios ya ha comprado la salvación para cada hombre; sin embargo, no nos hará ningún bien hasta que la aceptemos. Esa es la razón por la cual El nos dijo que propagáramos las Buenas Nuevas.
De acuerdo con las Escrituras, deberíamos orar para que la gente recibiera el don de la vida eterna que le es ofrecida.
Ni oro para que Dios sane a la gente, tampoco. Oro para que la gente reciba la sanidad que Dios ofrece.
No oro para que Dios llene a la gente con el Espíritu Santo. Oro como Pedro y Juan hicieron, para que reciban el don que Dios ofrece.
También note que el versículo diecisiete de este pasaje no dice, "Entonces les imponían las manos y Dios los llenaba del Espíritu Santo." Dice, ". . . y RECIBIAN el Espíritu Santo."
Creo que estamos en buena compañía con Pedro y Juan, así que yo sigo el mismo procedimiento de ellos: Impongo las manos sobre las personas para recibir el Espíritu Santo. Lo hago en fe porque está de acuerdo con las escrituras. También lo hago porque tengo un ministerio en esa línea. Los apóstoles enviaron a Pedro y a Juan a Samaria porque ellos tenían un ministerio en esa línea. (Dios nos unge para ministrar de acuerdo con Su llamado en nuestras vidas.)
Como un pastor denominacional hace medio siglo, cuando leí el Nuevo Testamento, el Espíritu de Dios me iluminó estos versículos y me convencí de que si yo había recibido el mismo Espíritu Santo que ellos recibieron, tendría la misma señal inicial de hablar en lenguas. No estaría satisfecho con nada menos.
Texto para Memorizar
"Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días" (Hechos 1:5).
LA LECCION EN ACCION:
Somos nacidos de nuevo por la Palabra de Dios. Pedro dice que somos nacidos "no de simiente corruptible, sino de incorruptible, POR LA PALABRA DE DIOS que vive y permanece para siempre" (1 Pedro 1:23)
Pedro y Juan enviados a Samaria
HECHOS 8: 14-17
14 Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria había recibido la
Palabra de Dios, enviaron allá a Pedro y a Juan;
15 los cuales, habiendo venido, oraron por ellos para que recibiesen el Espíritu Santo; 16 porque aún no había descendido sobre ninguno de ellos, sino que solamente habían sido bautizados en el nombre de Jesús.
17 Entonces les imponían las manos, y recibían el Espíritu Santo.
Nuestro texto dice en el versículo catorce, "Cuando los apóstoles que estaban en Jerusalén oyeron que Samaria HABIA RECIBIDO LA PALABRA DE DIOS. . ." Esta es una prueba concluyente que esta gente fue salva genuinamente. Los apóstoles reconocieron que eran salvos, porque después de oír las cosas maravillosas que Dios había hecho a través del ministerio de Felipe, enviaron a Pedro y a Juan a imponer las manos sobre los nuevos convertidos para que recibieran el Espíritu Santo.
No hay ningún registro de que alguno de aquellos a quienes Pedro y Juan impusieron las manos hubiera dejado de recibir. La Biblia simplemente declara, "Entonces les imponían las manos, y recibían el Espíritu Santo" (Hechos 8:17).
Pedro y Juan fueron enviados a Samaria con un propósito específico. ¿Cuál era ese propósito? La respuesta se encuentra en el versículo quince: "los cuales, habiendo venido, oraron por ellos para que recibiesen el Espíritu Santo."
Los otros apóstoles en Jerusalén los enviaron a Samaria con este propósito específico. ¿Por qué tuvieron que orar para que aquellos samaritanos recibieran el Espíritu Santo? ¿Por qué no pudo Felipe haber orado por ellos igualmente?
Debemos recordar que todos tenemos nuestro lugar en el plan de Dios. Debemos encontrar ese lugar y hacer lo que Dios quiere que hagamos. Dios tiene ministerios especiales; El no nos llamó a todos a ministrar de la misma forma, y El no nos dio a todos el mismo ministerio.
Felipe era un evangelista. Su ministerio era dirigir a muchos a la experiencia de la salvación en Cristo Jesús. Pedro y Juan, por otra parte, tenían el ministerio específico de poner las manos sobre la gente para recibir el Espíritu Santo.
Simón el Mago
HECHOS 8: 18, 19
18 Cuando vio Simón que por la imposición de las manos de los apóstoles se daba el Espíritu Santo, les ofreció dinero.
19 diciendo: Dadme también a mí este poder, para que cualquiera a quien yo impusiere las manos reciba el Espíritu Santo.
Simón el mago ofreció dinero a Pedro y a Juan, diciendo, ". . . Dadme también a mí este poder, para que cualquiera a quien yo impusiere las manos reciba el Espíritu Santo" (v.19)
Algunos han pensado que Simón trató de comprar el Espíritu Santo. No es así. El trató de comprar la habilidad de imponer las manos sobre las personas y hacerles recibir el Espíritu Santo.
Pedro le contestó,". . . Tu dinero perezca contigo, porque has pensado que el don de Dios se obtiene con dinero" (v. 20).
Hay cuatro palabras griegas diferentes traducidas "don" en el Nuevo Testamento. Esta palabra griega en particular significa "una dote". Pedro dijo que él y Juan estaban dotados, o investidos, por el Espíritu Santo para imponer las manos sobre las personas para recibir el bautismo del Espíritu Santo.
¿Cómo sabemos que estos samaritanos realmente hablaron en lenguas? Algunos que no creen en las lenguas argumentan que esta escritura no dice nada acerca de hablar en lenguas.
No hay evidencia, sin embargo, de que no hablaran en lenguas. De hecho, los estudiantes de Historia de la Iglesia saben que los Padres de la Iglesia Primitiva están de acuerdo en que si hablaron en lenguas en Samaria. Y leemos en otro lugar del Nuevo Testamento que aquellos que fueron llenos del Espíritu Santo hablaron en lenguas.
También es evidente que estos samaritanos habían hablado en lenguas, porque "Cuando VIO Simón que por la imposición de las manos de los apóstoles se daba el Espíritu Santo. . . ." (v. 18).
De cierto, el Espíritu Santo no puede ser visto con el ojo físico, porque El es un Espíritu. Sin embargo tenía que haber habido alguna clase de señal física por la cuál Simón supiera que habían recibido el Espíritu Santo. Tenía que haber habido algo que se registrara en los sentidos físicos de Simón para poder decir que ellos habían recibido el Espíritu Santo. Simón no recibió el Espíritu Santo, pero pudo ver que otros sí lo habían recibido. ¿Cómo?
"Quizás fue porque Simón vio que los samaritanos estaban llenos de gozo" me dijo cierto ministro. Esta sin embargo no podría ser la explicación, porque Simón ya había visto su gozo. El versículo ocho informa, ". . . había gran gozo en aquella ciudad." Ellos ya tenían gozo antes de que Pedro y Juan llegaran a Jerusalén, y antes de recibir el bautismo del Espíritu Santo.
¿Qué clase de señal, entonces, haría que Simón supiera que esta gente había recibido el Espíritu Santo cuando Pedro y Juan impusieron las manos sobre ellos? Toda evidencia indica que la señal que fue manifestada fue el hablar en lenguas. Esa era la señal que convenció a Simón de que habían recibido el Espíritu Santo.
El hablar en lenguas no es el Espíritu Santo, y el Espíritu Santo no es el hablar en lenguas - pero van de mano en mano. Es como la lengua del zapato. La lengua no es el zapato, y el zapato no es la lengua, pero cada uno es una parte importante del otro.
Cuando alguien compra un automóvil en Tejas, se le entrega un certificado como evidencia de que él es el dueño. El automóvil no es el certificado, ni el certificado es el automóvil, pero no podrá ir muy lejos con aquel automóvil si no tiene el certificado (o la evidencia).
Si tiene la plenitud del Espíritu Santo, debería tener la evidencia (las lenguas) a su lado.
Dese cuenta de que no hay la menor sugerencia en Hechos 8 de que Pedro y Juan les enseñaron a los samaritamos a esperar por el Espíritu Santo.
El enseñar a la gente a esperar por la plenitud del Espíritu Santo, el cual ya ha sido dado como un don gratuito, sólo produce duda e indecisión.
Howard Carter, quien era el supervisor general de las Asambleas de Dios en Gran Bretaña durante muchos años, fundó la más antigua escuela Bíblica Pentecostal del mundo, y fue uno de los primeros maestros en los círculos del Evangelio Completo alrededor del mundo.
El dijo que el enseñar a la gente a esperar por el Espíritu Santo no es nada más que una combinación de obras e incredulidad.
Don Gratuito
Note algo más en Hechos 8 Pedro y Juan no oraron para que Dios les diese a los samaritanos el Espíritu Santo. Oraron para que los samaritanos recibiesen el Espíritu Santo.
A menudo oramos, "Señor salva a las almas en el culto de esta noche. Sana a los enfermos." Sin embargo, no encontramos donde ellos oraron de este modo en los Hechos de los Apóstoles (y nosotros deberíamos orar de acuerdo con la Palabra).
Yo oro por la gente, pero no para que Dios los salve, porque El ya ha hecho algo para salvarles: Envió a su Hijo para morir por nosotros. Dios ya ha comprado la salvación para cada hombre; sin embargo, no nos hará ningún bien hasta que la aceptemos. Esa es la razón por la cual El nos dijo que propagáramos las Buenas Nuevas.
De acuerdo con las Escrituras, deberíamos orar para que la gente recibiera el don de la vida eterna que le es ofrecida.
Ni oro para que Dios sane a la gente, tampoco. Oro para que la gente reciba la sanidad que Dios ofrece.
No oro para que Dios llene a la gente con el Espíritu Santo. Oro como Pedro y Juan hicieron, para que reciban el don que Dios ofrece.
También note que el versículo diecisiete de este pasaje no dice, "Entonces les imponían las manos y Dios los llenaba del Espíritu Santo." Dice, ". . . y RECIBIAN el Espíritu Santo."
Creo que estamos en buena compañía con Pedro y Juan, así que yo sigo el mismo procedimiento de ellos: Impongo las manos sobre las personas para recibir el Espíritu Santo. Lo hago en fe porque está de acuerdo con las escrituras. También lo hago porque tengo un ministerio en esa línea. Los apóstoles enviaron a Pedro y a Juan a Samaria porque ellos tenían un ministerio en esa línea. (Dios nos unge para ministrar de acuerdo con Su llamado en nuestras vidas.)
Como un pastor denominacional hace medio siglo, cuando leí el Nuevo Testamento, el Espíritu de Dios me iluminó estos versículos y me convencí de que si yo había recibido el mismo Espíritu Santo que ellos recibieron, tendría la misma señal inicial de hablar en lenguas. No estaría satisfecho con nada menos.
Texto para Memorizar
"Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días" (Hechos 1:5).
LA LECCION EN ACCION:
"Pero sed hacedores de la Palabra, y no tan solamente oidores. . . " (Santiago 1:22).
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